viernes, 10 de octubre de 2008

Diez



Por la mañana temprano retomamos la ruta 12 y partimos hacia Puerto Iguazú. Había tenido un extraño sueño que incluía a un teletubbie viajando en un ovni con una muñeca inflable, pero no quise comentárselo a Victorio, que seguramente se lo atribuiría al opio que aún llevaba en lo escarlata de mis ojos.

En el camino nos detuvimos en una parada obligada: las Ruinas de San Ignacio. Las enormes construcciones que datan de las épocas jesuíticas nos recibieron como a un simple grupo de turistas más, ignorando nuestras segundas intenciones. Debo decir que fue un paseo realmente entretenido y pintoresco, con un guía que contaba las típicas historias de guías y hacía los típicos chistes de guías. De todos modos, sabíamos (o creíamos) que ese no era el lugar indicado por las pistas, pero era realmente una picardía pasar por tremendo sitio sin parar a visitarlo.

A la noche llegamos a nuestro destino. Puerto Iguazú es una ciudad chica, sin demasiadas atracciones, más allá, obviamente, del famoso parque nacional y sus benditas cataratas. Conseguimos un hotel con aire acondicionado (esta vez el viejo se tuvo que poner un poco más) porque ahí el calor es insoportable: húmedo como en Buenos Aires pero mucho más pesado, ese clima que obliga a bañarse unas tres veces por día, con agua fría.

A la mañana siguiente visitamos un parque conocido como La casa de los pájaros y una bonita galería de arte, pero nada parecía indicar que allí se encontraba lo que estábamos buscando. El resto del día lo pasamos en un bonito club con pileta, ya que el agua fría se hacía menester por eses lares.

El segundo día en dicha ciudad emprendimos la famosa excursión. Las cataratas nos recibieron con todo su esplendor y majestuosidad. No encuentro palabras para describirlas más que sublime en un sentido kantiano. El paseo comienza con un viaje en un bonito trencito que recorre la selva amazónica, y consta de dos paradas donde uno puede transitar los distintos circuitos que lo llevan a avistajes clásicos como la Garganta del Diablo, la triple frontera o la vista a la isla (Lo más sorprendente es ver a los pequeños pájaros negros atravesando las cascadas).

Sin embargo, de la piedra ni noticia. Lo espectacular del paisaje sirvió, en parte, para apaciguar la desilusión de volver con las manos mojadas, aunque vacías.

Mientras yo insistía en visitar Ciudad del Este y Victorio me recordaba que no estábamos allí de compras, sino buscando las piedras, un habitante de la comunidad vernácula nos enteró de que, si queríamos ver piedras, debíamos dirigirnos a las minas de Wanda, que se encontraban a unos 40 km del lugar. Como quedaba volviendo por la misma ruta hacia el sur, decidimos ir al día siguiente, ya dejado el hotel, jugándonos el todo por el nada.

Debo reconocer que la habilidad de Victorio para el habla y el engaño es excelente. Pese a que tuvimos que soportar una nueva ronda de “cosas de guías”, mi compañero ejemplar llevó la charla para donde él quiso y averiguó lo suficiente y necesario para que podamos hallar aquello que andábamos buscando.

Es cierto que la segunda piedra no fue una de las más difíciles de encontrar: efectivamente estaba escondida en aquel paseo y hacia el final del día ya estaba en nuestras manos.

La segunda pista hablaba de brújulas y cosas partidas, así que tampoco nos costó demasiado develar hacia donde debíamos dirigirnos.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bueno e instructivo, estoy conociendo mas de mi pais, como tengo mucho sueño no puedo pensar palabras (que limitada,jeje. Me voy a Tandil, el domingo leo 2 juntos.
Besos!!

Jardinero del Kaos dijo...

ANTES Q NADA, PERDON POR NO APORTAR EN 9(ME CLAVE UN ELIXIR Y ME QUEDE DORMIDO)
ASI QUR HOY VOY A APORTAR EL DOBLE O TRIPLE O TAL VEZ MAS, MAÑANA ME VOY AL PEPSI Y EL DOMINGO VOY A DORMIR COMO ABERDEEN ANGUS.

-LICANTROPO.
-CARL SAGAN
-ESTOCADA
-PARVULARIO
-ALZHEIMER
-KALASHNIKOV

¿PUEDO AGREGAR TITULOS DE CANCIONES?

-ME GUSTAN LAS MUJERES O AL MENOS ESO CREO, PERO A PESAR DE TODO SIGO SIENDO HETEROSEXUAL.

BASTA POR HOY.

TE DIJE QUE ME RECUERDA MUCHO A AMERICAN GODS DE GAIMAN, SI TE LO DIJE.

SOS LO MAS GALAN...
O DEBERIA SER: SOS LO MAS. GALAN...
SOS LOMAS GALAN...

ESTOY DIVAGANDO...
(ES EL FERNET)
BESO EN LA FRENTE!!!

Duquesa de Katmandu dijo...

Qué lindas las Cataratas...
(vamos con las hortalizas, tan buenas para la salú)

ACHICORIA
ZANAHORIA

Beso,

Filosofando al vacío dijo...

Se me hace díficil comentar un relato, pero fue de agradable lectura y deja la curiosidad de saber cómo sigue la historía.

saludos
Alejandro.

Paula Daiana dijo...

Muy bellas sus descripciones... sigo leyendo galán!