viernes, 4 de septiembre de 2009

3-Las piezas se acomodan


-¡Por el espíritu de Herman Toothrot! – Exclama Diógenes Mastreta. - ¿Alguno de ustedes ha visto por aquí a un mono blanco?

En un ambiente alterado y silente como el actual, los nervios se tensan y los gestos exagerados se captan el doble. Diógenes examina la carta de bebidas con cuidado, mientras mira atento hacia las mesas. El mal genio de Santino Conde fue el primero en reaccionar:

-¿De qué hablás, pirata borracho? ¿De qué manicomio te escapaste?
-Acá el único ebrio sos vos, mi estimado amarillo: tu aliento a whisky barato es más fuerte que el de un cerdo descompuesto… Sin embargo, nadie ha respondido mi pregunta.
-¿A quién le dijiste cerdo?

Conde se levanta de la mesa. Eugenio Echagüe piensa en salir disimuladamente: si se surgen problemas en el bar es probable que llegue la policía, y no quiere más líos con ellos desde el incidente de sus zapatos. Sin embargo es Valentín Flores quien toma la palabra:

-Ey, ey, tranquilos muchachos, nadie quiso ofender a nadie, ¿verdad? Dígame, señor… eh…
-Diógenes Mastreta.

Santino vuelve a sentarse lentamente, sin quitarle la vista de encima a tan extraño personaje. Arrieta no puede evitar una sonrisa al oír su nombre.

-Diógenes… Yo soy Valentín, el dueño del bar. ¿Por qué su pregunta sobre el mono?
-¿Quién ha tocado esta carta por última vez?

Valentín hace memoria: el extraño que le había dado la información a medias había estado mirándola antes de hablar con él. Genaro Cúspide se acerca a ellos para oír la conversación.

-Fue un hombre… vestía un sobretodo y un sombrero, no pude ver bien su rostro… dijo algo acerca de un escritor que se distrajo y sobre un muerto en el barrio…

-Creo que yo puedo explicar eso. Valentín Flores, ¿verdad? Yo soy Genaro Cúspide. Necesito decirte algo…

K mira con atención: no puede evitar pensar que cuando hablan de un escritor se refieren a él.

Por su parte, Rocambole sigue los movimientos de las conversaciones intentando captar algo de lo que se habla. Su mente rebuscada y deductiva le dice que todas las fichas se estaban acomodando sobre el tablero. No se equivoca al esperar que las palabras del corsario resuelvan parte del asunto:

-Mis queridos camaradas, he aquí un desafío: en esta carta de bebidas alguien ha dibujado un mapa… ¿Por qué no se ve a simple viste? Fácil: para confeccionarlo ha utilizado cabellos de simio blanco.

Linares se siente dibujado: no le gustan las aventuras y comienza a arrepentirse de haber entrado a ese bar. Recuerda que una vez se propuso conquistar el mundo: por un pequeño desliz casi termina conquistando a Edmundo. Los errores de imprenta pueden ser fatales.

Sigue Mastreta:

-Yo tengo un pequeño barco, sólo necesito una valiente tripulación: ¿Alguien de los presentes tiene experiencia en altamar?

Somosa no puede creer lo que está escuchando: de una vida de aburrido oficinista de pronto se ha convertido en viajero trotamundos y ahora podría llegar a ser un… ¿Aventurero? Golpea el hombro de Arrieta: él trabajaba en el puerto de Marruecos, es un experto navegador… Sus ojos piden lo que sus labios callan y esperan.

-Yo sé navegar. –Accede finalmente Alfredo Arrieta ante los ruegos de su compañero de mesa. – Pero realmente no creo que nada de esto tenga sentido.

K y Valentín no le quitan la mirada de encima a Genaro esperando sus explicaciones. Florencio Gauna se les une en la barra. Al fin Cúspide abre la boca:

-Valentín, tenés que acompañarme, él necesita verte. Me dijo que lo que tiene que decirte puede ser crucial para la continuidad de la existencia.
-¿De qué existencia estás hablando? – K interrumpe.
-De toda la existencia. Al menos de toda la nuestra…

-¡Perfecto! Ya tengo mi contramaestre… Ahora lo que necesitaría es una brújula… Diantres, ¿por qué nunca llevo una encima? – Al escucharlo Mariana tuerce los ojos.
-Yo tengo una… - Agrega Johnny John levantando tímidamente la mano- Y creo que esta vez funciona.

-Valentín, esto no me gusta nada.
-Tranquilo señor K, usted también es de gran importancia. De hecho, me atrevería a decir que es el principal culpable.
-¿Quién quiere hablarme? – Increpa el dueño del Albatros.

Ángel Vergara mira atento la situación. Comprende que ha llegado el momento de su prueba:

-Yo también voy con ustedes. Tengo cierta habilidad que podría serles útil.
-¿Y de que don se trata, muchacho?
-Bueno yo… puedo anotar lo que pase cada día en mi diario – No se atreve a contar su convicción acerca de que puede volar, lo mejor será que lo vean directamente en escena cuando fuera necesario.
-¡Perfecto! Siempre es bueno que alguien escriba las bitácoras. ¡Ya podemos partir!

-Y nosotros también. Vamos. -Agrega Genaro Cúspide y Florencio Gauna asiente a su lado.

Valentín mira a Julia, su mujer, y su beba Victoria. ¿Debería acompañar a estos dos extraños?

-No se preocupen por las damas, yo me ofrezco para quedarme a cuidarlas… -Santino Conde se acerca y vuelve a llenar su vaso con una botella de whisky que toma del mostrador.

17 comentarios:

Taller Literario Kapasulino dijo...

Muy buenos los diálogos Galán.
Esta historia ya tomo vida propia!

SIL dijo...

Estás acomodando realmente las piezas, Donjuan.
Se abrió el juego, veremos como sigue.

PD:
Aunque intuyo que no tiene tan mal genio...(hace como que tiene)...
no creo que las damas estén muy seguras con Santino Conde, yo no las dejaría a su cuidado.
:)
Mil besos, Galán.

Agua dijo...

Bueno bueno, esto se esta poniendo interesante...van a irse todos juntos a empezar una nueva aventura! esto pinta genial! besos de agua salada!

Anónimo dijo...

Excelente lectura la que acabo de tener. Quedé maravillado. Te felicito.

Unknown dijo...

Un gil bárbaro Santino!!

No creo que le haga honor al nombre.

Besos!

Ivan Lukman dijo...

Vengo un poco atrasado, pero me ha gustado mucho lo que lei, asi que seguiremos pasando.

Desde una habitacion en la joven Buenos Aires te dejo un fuerte abrazo

LOLI dijo...

MIL BESAZOS CABALLERO NEGRO,NO ME MOLESTES QUE ESTOY HIPNOTIZADA LEYENDOTE,MUY INTERESANTE,NOS VAMOS A LA MAR...

MUACK

Norma Ruiz dijo...

hola galán:
cada vez qué te visito me quedo atrapada en tús historias.
esos diálogos son maravillosos.
tienen tanta realidad, que a veces me los creo.
te felicito galán y hasta la próxima historia-
besos

Jardinero del Kaos dijo...

El mono blanco, el tipo del sobretodo y el sombrero, se viene una crisis???

Boludo le dicen al Argenchino ¿No?

K es la clave,

otra vez a navegar????

estas y otras interrogantes seran respondidas en el proximo numero de...

Gara dijo...

Como siempre, me cautivan tus historias, tengo q ponerme al dia con todas ellas.

Besos

Diang Lugo dijo...

Siempre tu mi galán, poniendole mucho empeño a tus letras... Y dando muestras evidentes de que tienes muchísimo talento...

Te dejo acá mis besos de siempre, que son tuyos mi galán de barrio...

Giselita dijo...

Esto está cada vez más interesante!!!
Me encanta, espero por más aventuras.
Besos!

Pablo dijo...

Estoy con Santino.

Paula Daiana dijo...

Cada vez se pone más interesante esta historia e invita a releer más sobre sus personajes!!!... una cosa Galán como es eso que a Linares no le gustan las aventuras, me lo hacía diferente!
Besoss y mañana comienzo con los 31!

Arya dijo...

Mucho que leer.. te dejo el abrazo, regresare a leer los anteriores.. q ando perdida en accion.

Abrazossssss : )

LOLI dijo...

Para cuando la continuación?

Un besazo

el oso dijo...

Las piezas se acomodan, pero la tensión sigue en aumento. El barrio ya es una pintura universal...